Mascarillas verdades y mentiras: Final

abril 27, 2022 - Otras noticias - Tagged: Covid-19, mascarillas

No queremos dejar pasar la oportunidad de dejar por escrito, ahora que acaba la obligatoriedad de su uso, de escribir un post final con las impresiones que durante estos 2 años nos han apesadumbrado acerca de lo fácil que es manipular a la opinión pública y a los medios de comunicación, cada vez más dependientes.

Mascarillas si mascarillas no

Por seguir una cronología, en el 1º articulo «Mascarillas verdades y mentiras» de 30 de Abril de 2020 relatábamos como desde enero 2020 y sobre la amenaza que se acercaba «nuestros proveedores chinos de maquinaria ante nuestras insistentes preguntas sobre lo que estaba pasando con esa nueva enfermedad insistían en que usásemos mascarillas: use face masks, face masks. Hice caso a mis proveedores chinos y de regalo para mi cumpleaños pido a mi cuñado (trabaja en un hospital) que me regale una mascarilla FP3. Él se lo tomaba a guasa por aquella época.

La pandemia se extendió por todo el mundo, muchos lideres de la sociedad, políticos, medios e incluso médicos no vieron necesario en las primeras semanas ir preparando la primera barrera de defensa contra el COVID, La OMS no recomendó el uso obligatorio de las mascarillas hasta el 6 de Abril de 2020 y ningún país occidental preparó con la antelación requerida la maquinaria de fabricación para inundar el planeta de una de las herramientas de prevención más eficaces contra el COVID. Solo en España murieron alrededor de 75.000 personas.

Es cierto que cuando las recomendaciones de usar mascarilla te llegan de un pueblo con costumbres diferentes a las nuestras (que come murciélago o pangolín), tradicionalmente poco dado a expresar sus ideas, parece que es menos creíble que si te lo dicen desde un país occidental.

Esta sirve, esta no sirve…

En Abril del 2020 ya casi todo el mundo aceptaba el uso de las mascarillas pero no había para todos.

La guerra de la protección, fruto de esa falta mundial de previsión, se nos venía encima. Los precios de los elementos de protección: guantes, mascarillas sanitarias, Epic, protectores… sufrieron una especulación como nunca se había visto en el planeta. Administraciones locales les robaban partidas de compra de material a otras administraciones nacionales y viceversa. Surgieron primos, hermanos y comisionistas por doquier, etc.

Desde el sector del textil, paralizado como otros sectores por la pandemia, se vio la oportunidad de contribuir a la lucha contra la COVID y la escasez de mascarillas del sector sanitario, desarrollando con una tela de poliéster con eficacia de filtración mínima del 90%, una mascarilla que pretendía (como todas) que el usuario de la misma no expulsara las temidas micro gotitas de saliva infectadas de COVID.

Aquello empezó a venderse y popularizarse rápido, resultaban ser económicas y reutilizables lo que beneficiaba al medio ambiente (no he gastado más de 10 mascarillas de tela en casi 3 años y hasta hoy no he pillado el COVID) además añadió un elemento decorativo a nuestro vestuario. La personalización hizo el resto para acabar de popularizar el producto.

Como recogimos en el 2º post Mascarillas verdades y mentiras 2ªParte el 4 de Junio de 2020, rápidamente salieron los primeros agoreros: científicos, médicos, políticos y demás voceros, primos de primos, de hermanos y demás enfrascados en la importación de productos sanitarios con precios desorbitados, reclamando que la mascarilla personalizada desarrollada por empresas locales no se podía llamar legalmente mascarillas. Había que colocar mascarillas quirúrgicas, FFP2-KN95, FFP3, etc.. Todas ellas importadas de China y no reutilizables.

Al final, el sector acabó denominando a las mascarillas cubrebocas, nombre que se le dio para no ofender a los fabricantes tradicionales, políticos o comisionistas.

Cierto es que en los primeros meses hubo un descontrol tremendo, gente que no tenía ni idea, y que se puso a confeccionar mascarillas, en tejidos de punto, licra, lana, barbaridades que rayan la lógica por no decir gilipolleces.

El gobierno intervino al final obligando a los fabricantes textiles a seguir las directrices de la normativa UNE-0065 en cuanto a propiedades del tejido y a la confección de mascarillas cubrebocas, esto fue algo bueno para quitarse de en medio al amateur de buena voluntad pero obligó a los profesionales en muchos casos a certificar cada modelo de mascarilla.

¿Pero hemos acabado aprendiendo para qué nos tapamos la boca?

Yo creo modestamente que no. Como se ha dicho miles de veces desde el primer día, «la mascarilla es para proteger al de enfrente de mis virus, no para protegerme a mi mismo». Después de casi 3 años aún pensamos que la protección es personal y no colectiva.

Si evitas expulsar a la atmósfera tus gotitas de saliva contagiada, los famosos «aerosoles«, infectando a diestro y siniestro, y a su vez, ese otro hace lo mismo, la enfermedad no se extiende, esto no es nuevo, ya desde hace décadas se protegían de la peste, gripe… con mascarillas.

Nuestro agradecimiento

Con este artículo queremos agradecer a las múltiples empresas del sector del personalizado textil que se lanzaron en un momento de incertidumbre a fabricar un producto económico, reutilizable y ecológico que ayudó a salvar vidas «como es el cubrebocas».

En Arkiplot no vendimos mascarillas de importación China. Importamos muchas cosas de China, pero no mascarillas. Apostamos por el cubrebocas fabricado por la industria del textil nacional y nos permitió vender en los peores meses más de 40.000 unidades por todo el territorio, ayuntamientos pequeños, asociaciones deportivas, copisterías, etc. confeccionados por los talleres españoles, utilizando textil homologado que ofrecía igual o mejores resultados y mayor trazabilidad higiénica que cualquier importación. Además de afianzar la industria española en un momento crítico, y lo principal «REUTILIZABLES CON TODA LAS GARANTÍAS».

Nuestros gobernantes, entre tanto, ayudando a empresas señaladas, a importar carísima maquinaria china para fabricar mascarillas sanitarias FFP2-KN95, FFP3, etc.. Y los palmeros de los medios de comunicación pregonando lo peligrosos que eran los cubrebocas.

27 de Abril de 2022, vengo por la calle, pasando por un descampado vallado, llueve y miro entre la maleza si hay caracoles… ¡no hay! pero cada 2 metros una mascarilla FFP2, ¿cubrebocas de tela? ninguno por los suelos. Esto es lo que de verdad me ha impulsado a escribir éste articulo final. Porque es importante no creer lo primero que ves o lo que lees.

No, todos somos culpables de algún modo.